Líder jonronero a fuerza de esteroides o que?
Barry Bonds, hombre récord de los jonrones
En una temporada donde los esteroides han sido los protagonistas, Bonds ha estado en el ojo del huracán por supuestas acciones relacionadas al farmaco; aunque no se le ha acusado formalmente, en este instante Bonds con su nuevo récord está dividiendo a la afición entre si es legal el registro o si merece un asterisco. Henry Aaron mando un video de felicitación.
Barry Bonds conectó su cuadrangular número 756, un leñazo entre el jardín derecho y el central, para dar un mensaje enfático: le guste o no a algunos, es el mejor jonronero de la historia. En el compromiso que San Francisco perdió 8x6 ante Washington Bonds rompió el récord de Hank Aaron, en el quinto inning, al encontrar un lanzamiento con cuenta de 3-2, de Mike Bacsik, serpentinero de los Nacionales de Washington. Tres días antes, Bonds empató a Aaron con un garrotazo entre el jardín izquierdo y el central, en San Diego. En cuanto a Aaron, había dicho que no tenía interés en atestiguar el rompimiento de su récord de 33 años. Cumplió con su palabra, pero ofreció un mensaje grabado de felicitación. ”Muchas gracias. Tengo que agradecerles a todos, a los aficionados de aquí, de San Francisco. Ha sido fantástico", dijo Bonds, poco después de pisar el plato. A su lado estaba su padrino, Willie Mays.
"Tengo que agradecer a mis compañeros. Durante todo esto ustedes han sido fuertes y me han dado todo el apoyo que necesito, y nunca olvidaré esto mientras viva".
Tras agradecer también a sus hijos, señaló: "Me complace haber hecho esto antes de que ustedes fueran a la escuela".
El toletero dirigió también palabras de agradecimiento a los Nacionales y a su padre, el ex beisbolista Bobby Bonds.
"A mi papá", dijo Bonds antes de que la voz se le quebrara por el llanto, mientras apuntaba hacia el cielo. "Gracias por todo".
En una señal sobre la índole controversial del récord, ni el comisionado de las Grandes Ligas ni el propio Aaron estuvieron presentes en el estadio.
Selig estuvo en el graderío cuando Bonds empató el récord, decidiendo privilegiar la historia del béisbol por encima de las acusaciones de consumo de esteroides de las que ha sido sujeto el artillero de los Gigantes de San Francisco.
El martes por la noche, Selig envió a un representante, el vicepresidente ejecutivo de las Grandes Ligas, Jimmie Lee Solomon.
En cuanto a Aaron, había dicho que no tenía interés en atestiguar el rompimiento de su récord de 33 años. Cumplió con su palabra, pero ofreció un mensaje grabado de felicitación, el cual fue mostrado por la pantalla del parque.
"Ofrezco mi felicitación a Barry y a su familia", dijo Aaron.
También estuvieron ausentes los aficionados que habían mostrado carteles con asteriscos que cuestionaban la legitimidad del récord, al considerar que al menos parte del poder de Bonds se debía a los esteroides.
Bonds, siete veces nombrado el Jugador Más Valioso de la Liga Nacional, conectó su 22do vuelacercas del año. El artillero de 43 años rompió el récord de Mark McGwire, de más jonrones en una campaña, al llegar a 73 en el 2001. Aunque no ha vuelto a mostrar un poderío semejante, sigue causando estragos a los rivales.
Bonds y la directiva de los Gigantes tuvieron fricciones sobre el contrato, antes de esta campaña. Esta noche de celebración representó el motivo principal para que el dueño Peter Magowan trajera de vuelta al estelar jardinero izquierdo, a fin de que cumpliera con una 15ta temporada en San Francisco.
Lo contrató por un año y 15,8 millones de dólares.
El rápido ascenso de Bonds hacia el récord perdió velocidad en los últimos años, luego que la edad y varios problemas en las rodillas lo afectaron. Bateó 258 jonrones del 2000 al 2004 pero sólo ha sumado 53 desde entonces.
Mientras que los esteroides han empañado la búsqueda del récord por parte de Bonds, fueron las tensiones raciales el tema principal de conversación cuando Aaron rompió la marca de Ruth en 1974. Aaron tuvo que soportar mensajes de odio enviados a su buzón, así como amenazas de muerte por parte de fanáticos racistas, quienes pensaban que un negro no debía romper el récord impuesto por un héroe blanco, el Gran Bambino Ruth.
El ex comisionado Bowie Kuhn atestiguó cuando Aaron empató el récord, pero no estuvo presente en el duelo en que la marca fue superada, un gesto que molestó a muchos seguidores del toletero.
Selig es un amigo cercano de Aaron y ofreció a Bonds una tibia felicitación cuando empató el récord.
Ahora queda pendiente hasta donde llegará la marca, en donde se establecerá el nuevo récord de jonrones y cuantos años pasarán para que otro pelotero pueda superar esa marca.
Quedará la MLB satisfecha, o ahora arrecieran las acusaciones ante un Bonds sobre esteroides, sea lo que sea, la situación se ha puesto tensa y solamente los latinos han sido perjudicados, merecerán Bonds el trato de McGwire o entrará en su primer intento a Cooperstown.
"Tengo que agradecer a mis compañeros. Durante todo esto ustedes han sido fuertes y me han dado todo el apoyo que necesito, y nunca olvidaré esto mientras viva".
Tras agradecer también a sus hijos, señaló: "Me complace haber hecho esto antes de que ustedes fueran a la escuela".
El toletero dirigió también palabras de agradecimiento a los Nacionales y a su padre, el ex beisbolista Bobby Bonds.
"A mi papá", dijo Bonds antes de que la voz se le quebrara por el llanto, mientras apuntaba hacia el cielo. "Gracias por todo".
En una señal sobre la índole controversial del récord, ni el comisionado de las Grandes Ligas ni el propio Aaron estuvieron presentes en el estadio.
Selig estuvo en el graderío cuando Bonds empató el récord, decidiendo privilegiar la historia del béisbol por encima de las acusaciones de consumo de esteroides de las que ha sido sujeto el artillero de los Gigantes de San Francisco.
El martes por la noche, Selig envió a un representante, el vicepresidente ejecutivo de las Grandes Ligas, Jimmie Lee Solomon.
En cuanto a Aaron, había dicho que no tenía interés en atestiguar el rompimiento de su récord de 33 años. Cumplió con su palabra, pero ofreció un mensaje grabado de felicitación, el cual fue mostrado por la pantalla del parque.
"Ofrezco mi felicitación a Barry y a su familia", dijo Aaron.
También estuvieron ausentes los aficionados que habían mostrado carteles con asteriscos que cuestionaban la legitimidad del récord, al considerar que al menos parte del poder de Bonds se debía a los esteroides.
Bonds, siete veces nombrado el Jugador Más Valioso de la Liga Nacional, conectó su 22do vuelacercas del año. El artillero de 43 años rompió el récord de Mark McGwire, de más jonrones en una campaña, al llegar a 73 en el 2001. Aunque no ha vuelto a mostrar un poderío semejante, sigue causando estragos a los rivales.
Bonds y la directiva de los Gigantes tuvieron fricciones sobre el contrato, antes de esta campaña. Esta noche de celebración representó el motivo principal para que el dueño Peter Magowan trajera de vuelta al estelar jardinero izquierdo, a fin de que cumpliera con una 15ta temporada en San Francisco.
Lo contrató por un año y 15,8 millones de dólares.
El rápido ascenso de Bonds hacia el récord perdió velocidad en los últimos años, luego que la edad y varios problemas en las rodillas lo afectaron. Bateó 258 jonrones del 2000 al 2004 pero sólo ha sumado 53 desde entonces.
Mientras que los esteroides han empañado la búsqueda del récord por parte de Bonds, fueron las tensiones raciales el tema principal de conversación cuando Aaron rompió la marca de Ruth en 1974. Aaron tuvo que soportar mensajes de odio enviados a su buzón, así como amenazas de muerte por parte de fanáticos racistas, quienes pensaban que un negro no debía romper el récord impuesto por un héroe blanco, el Gran Bambino Ruth.
El ex comisionado Bowie Kuhn atestiguó cuando Aaron empató el récord, pero no estuvo presente en el duelo en que la marca fue superada, un gesto que molestó a muchos seguidores del toletero.
Selig es un amigo cercano de Aaron y ofreció a Bonds una tibia felicitación cuando empató el récord.
Ahora queda pendiente hasta donde llegará la marca, en donde se establecerá el nuevo récord de jonrones y cuantos años pasarán para que otro pelotero pueda superar esa marca.
Quedará la MLB satisfecha, o ahora arrecieran las acusaciones ante un Bonds sobre esteroides, sea lo que sea, la situación se ha puesto tensa y solamente los latinos han sido perjudicados, merecerán Bonds el trato de McGwire o entrará en su primer intento a Cooperstown.
1 comentario:
«le guste o no a algunos, es el mejor jonronero de la historia»
¿Y qué de Sadaharu Oh??
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